Esta semana vamos a hablar sobre qué piedras usar para sanar emocionalmente.
1. Celestita Esta piedra te ayudará a estar más tranquilo y poder superar cualquier problema desde un estado emocional más balanceado. A mi me gusta usarla cuando estoy enojada, porque me ayuda a calmarme y a no explotar. De igual forma, si deseas hablar con alguien, te ayudará a comunicarte calmada y asertivamente. Especialmente si eres una persona que evita la confrontación y prefieres quedarte callada para evitar crear problemas o agrandarlos, te recomiendo usar esta piedra por un periodo prolongado, puede ser un mes o más, llévala a la altura del cuello, verás que te será más fácil expresarte tranquilamente, sin estar enojado, y sin herir a otra persona.
2. Crisocola: esta piedra te ayudará a sanar la herida emocional, a que poco a poco dejes de sentir dolor y que puedas perdonar y perdonarte. Llévala por un periodo prolongado de tiempo a la altura de tu corazón.
3. Rodocrosita Creo que si tuviera que escoger una sola piedra para sanar emocionalmente sería la rodocrosita. Especialmente si estás en una situación que te ha lastimado profundamente, si has pasado por un trauma horrible, una pérdida, o cualquier tipo de problema que tal vez ha sucedido de repente, esta piedra te puede ayudar. La rodocrosita nos da la calma y la fortaleza necesaria para superar la situación. Nos ayuda a tener más amor y compasión hacia nosotros mismos, a quitarnos la culpabilidad que podemos sentir viéndonos con ojos de amor, y aumentando nuestra autoestima.
4. Quiastolita Esta piedra te ayudará a que estés bien enraizado, y al mismo tiempo a transformar todo lo negativo en positivo, y si lo que te lastimó te dejó con miedos, te motivará a reducir esos miedos, y nuevamente puedas confiar en ti mismo y en otras personas y que puedas enfrentar la vida más positivamente.
5. Citrino El citrino te ayudará a reducir la tristeza, a que puedas ver una luz a final del túnel. Esta piedra nos ayuda a volver a reconectarnos con nuestra luz interior y a comenzar a brillar cada vez más fuerte hasta llegar a estar contentos otra vez. Si te gusta meditar puedes hacerlo mirando a la piedra, viendo los matices amarillos y a veces, con la luz y con la forma que tiene la piedra naturalmente, en el interior se reflejan pequeños arcoíris, que al verlos es imposible no sonreír. Puedes usarla siempre contigo en un bolsillo, en tu escritorio, o a la altura de tu plexo solar. A veces cuando uno está muy triste la piedra pierde su “brillo” y se siente más pesada energéticamente, así que límpiala frecuentemente.
Espero que este post te sirva. Si tienes dudas sobre alguna piedra en particular o si deseas ayuda al escoger piedras para un problema en específico, no dudes en dejar tu comentario o escribir a cristalesdepaz@gmail.com. También puedes compartir este post en tus redes sociales.
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